La corrupción es peor que el sargazo

Cuando hablamos de esas problemáticas que nos dañan a todos, como el impacto y destrucción que causa el sargazo a nuestras playas, vemos que no se logra un manejo integral en colectivo y vemos que no se resuelve, cuando no se avanza, cuando los esfuerzos se diluyen, normalmente es por qué hay un grupo o grupos detrás aprovechándose de las malas prácticas.
Cuando algo no funciona, pregúntense ¿quien se beneficia del mal funcionamiento?
Bueno, yo fui Director de Siresol hasta el 2014 así que hablando de sargazo, tuvimos el primer recale fuerte y digno de llamar nuestra atención en el 2012, por qué Fernando Escamilla que era el Secretario de Infraestructura en tiempos de Borge, me llama pidiéndome aceptar una serie de volquetes del alga en el relleno sanitario de Cancún. Yo me negué y resolví mandarlo a un campo de fútbol por ahí por la Av 20 de noviembre y tan tan. Recuerdo que le dije a Escamilla, no es un Residuo Sólido Urbano es de Manejo Especial así que es tuyo.
Así año con año había afectación, el sargazo seguía pegándonos en la primavera y verano pero aún era controlable.
En el 2016 salió Borge y entró Carlos Joaquín y como fue un año de transición pues se hizo poco o casi nada contra los recales masivos de sargazo, era aún controlable y seguíamos pensando que era eventual, un año aparecía y otros no. Eso creíamos.
El 2017 encendió las alarmas por que el ataque fue realmente intenso y agresivo, pero aún así nos limitamos a la limpieza de las playas.

No supimos entender los avisos de la naturaleza, no entendíamos que esto era una advertencia por la forma negligente de nuestros desarrollos costeros en todo el Atlántico y Caribe. No entendíamos que la acidificación del océano por el calentamiento global es irreversible y eso propicia el crecimiento de las algas.
Pero llego el 2018, la arribazon de sargazo ese año fue terriblemente brutal, solo las imágenes pueden explicar esto, parecía el final de nuestra industria turística, la escala del recale masivo del sargazo fue apocalíptica.

Ahí nació la idea de la contención con barreras en aguas someras, fuimos a la
Sonda petrolera de Campeche, se investigó con los países petroleros ¿como contenían los derrames de petróleo? Ya que el petróleo y el sargazo se parecen en un detalle: Ambos flotan y principalmente pueden manejarse en esos primeros tres o cuatro metros de la superficie. Comenzaron a buscarse aprovechamientos posibles.
En Cancún se comenzaron a instalar barreras desde Punta Nizuc y funcionaban, la empresa Goimar, encargada de Cancún, incluso trajo un barco de respaldo de los que sirven para auxiliar a las plataformas cuando tienen accidentes.
En Playa del Carmen surgió otra empresa que se publicitaba como Grupo Arco y en Puerto Morelos una más pequeña llamada Dakatso. En Tulum estaba Contendores y Más y había otra lista de empresas menores secundarias también, que una rentaba contendores, que otra tenía una retro, que a esta le tocaba dar dos lanchas y así se pidieron a la Federacion 280 millones de pesos.
Lo insólito vino después, cuando las empresas comenzaron a cobrar, de pronto tronaron todas, el Gobierno del Estado no les pagó.

Las empresas pequeñas cobraron en forma repartida 40 de esos 280 millones, de pronto se supo que Grupo Arco tenía un contrato de 240 millones y que no alcanzó el dinero para las otras. Ellos cobraron todo.
Eso sucedió en el seno de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente, la Sema, cuando Alfredo Arellano era el titular y no digo que se lo haya robado, habría que investigar, pero si digo que sucedió en sus narices.
Nadie hizo nada, el titular fue destituido hasta el 2020, dos años después. No se por que. Hay que revisar otras cosas que hizo como la Ley de Residuos ¿que consultores metió?.
El daño que causó Arellano por esas desiciones es inconmensurable, las consecuencias fueron terribles.
Al año siguiente, todos denunciaban para arriba lo que había sucedido, incluso hasta llegó a la mañanera el caso.
En un intento por obtener otra vez esos jugosos 300 millones de pesos, en el 2019 la Secretaría de Gobierno del Estado declara y publica en el Periódico Oficial del Estado de Quintana Roo una Contingencia Ambiental por el Sargazo buscando recuersos de emergencias federales del tipo que bajan cuando hay desastres naturales.
Ese día, yo en mi papel de Pescador Vloggero que así se llamaba mi Canal de YouTube fui e hice un video que recorrió el mundo, le reclamo al Presidente de Mexico su negativa a darnos recursos para combatir el sargazo y la manera como minimizaba el problema. Algunos recordarán ese histórico reportaje reclamador.
Es en ese momento cuando el Presidente da un manotazo sobre la mesa y asigna a la Secretaria de Marina los recursos y el problema del sargazo.
Hoy sigo pensando que el manejo del sargazo es más amplio y que la marina es insuficiente, en el mar es de la Semar, pero en la playa son los Ayuntamientos a través de sus direcciones de Zofemat quienes pelean con los recales y más allá de la playa cuando se transporta, acopia, podría aprovecharse y se busca una disposición final es de la Sema, pero además hay un componente muy importante de concesionarios privados afectados y enfrentándolo importante, y la población en general, todos deben ser coordinados e incluidos.
No nos desviemos.
Para acabar pronto, el martes 7 de febrero el Diario Oficial de la Federación publicó una "advertencia" solicitando a Entidades Federativas y Municipios abstenerse de contratos con la empresa "Comercializadora Chaktumen" que es Grupo Arco.
En el 2019 cuando estalla el escándalo este del dinero que desapareció, el empresariado de Playa del Carmen solicita a Transparencia Municipal información sobre el contrato a Grupo Arco y el Ayuntamiento responde que no existía una relación con esa empresa, pero luego el Lic. René Medrano aclara dejando este antecedente, que no había respondido Transparencia por que el contrato estaba a nombre de "Comercializadora Chaktumen" y su marca comercial era Grupo Arco.
Y todos dijimos, ah bueno, con razón:
Es que Chaktumen es Grupo Arco.
Pero la historia no acaba aquí, esta misma empresa además de servir de facturadora en el 2018 reincide ahora con un contrato directo con el Ayuntamiento de Solidaridad, ya en tiempos de Laura Beristain y cuando cae Cristina Torres electoralmente, agenciándose otros 50 millones.
No instalaban las barreras, no funcionaban, amontonaban WaveRunners en la playa, montaban su campamento de simulación, tenían una lancha o dos dando vueltas, sus sargaceras eran de pantomima, incluso movían sargazo de la zona entre el muelle "navega" y el Recodo, a Playacar, para ahorrarse fletes al relleno sanitario, usaban personal que pagaba Zofemat y que ellos justificaban poniéndoles playeras de Grupo Arco, un verdadero cochinero, típico de la administración de Beristain ¿recuerdan las obras de la 5a avenida y sus empresas fantasma?, bueno, algo así o peor.
La relación electoral de la salida de Cristina Torres e ingreso de Laura Beristain con esta empresa y con el problema del sargazo, se las dejo de tarea, es solo para grandes investigadores de ciencia ficción.
Bueno, el Presidente de México, al final tuvo razón en quitarle a los Quintanaroenses el dinero para el sargazo, insisto que el Presidente aún no ha comprendido la amplitud del manejo integral del sargazo, pero eliminó la tranzadera que estaba sucediendo de un buen manotazo y redujo la corrupción.
Luego los Ayuntamientos inventaron el impuesto al saneamiento que es otra historia pendiente.
En fin, háganos el cierre.
Es verdad, se desvió ese dinero y las consecuencias fueron nefastas en nuestra lucha colectiva contra el problema del sargazo.
Seguimos pagando esas consecuencias.
La problemática ambiental y económica derivada de los recales masivos del sargazo año con año es terrible, es estratégica y brutal, pero nuestra corrupción es peor.
Podemos lograr un manejo integral de este recurso natural, convertirlo en materia prima y manejarlo como biorresiduo y proteger nuestras playas que son nuestro activo más valioso.