Valioso nuestro Arrecife Maya

La misma corriente marina del Gran Caribe, que arrastra las enormes hileras de sargazo y las estrella contra nuestras costas, es la misma que nos trae nutrientes y tristemente polución y plásticos.
La enorme masa de agua cálida vierte todo lo que arrastra sobre nuestro arrecife y sobre nuestro litoral costero.
Es la causa de la existencia del arrecife y hoy la fuente de efectos negativos también sobre del mismo.

El sargazo nos ha ayudado a entender como pasa enfrente de nosotros flotando todo eso y cuando voltea y recala en nuestras playas o arrecifes, paralelos a nuestras playas.

He sido buzo y pescador desde hace 45 años y he recorrido este Gran Arrecife Maya mil veces, tengo un compromiso con el, una relación profunda que no puedo explicar, si no tuviera que pagar colegiaturas estaría en el mar todo el día, varios años fui el pescador vloggero en youtube.

El Caribe Mexicano es una barrera que frena ese enorme chorro de agua que viene en la
corriente del Caribe, estamos orientados Norte/Sur, verticales, y la corriente viene desde las Antillas Menores en dirección exactamente perpendicular Este/Oeste, horizontal.
Le llamamos orgullosos el Gran Arrecife Maya, llamado también el Arrecife Mesoamericano o decimos que tenemos la segunda barrera de coral más grande del
planeta, después de la australiana.
Nuestro arrecife nace en Cabo Catoche, en el Canal de Yucatán pegado a la costa mexicana, y dependiendo de la plataforma sumergida de la Península de Yucatán corre paralelo al sur, cercano o lejano relativamente a la línea de playas.

Por eso es sumamente vulnerable a nuestro desarrollo turístico, urbano y a la polución que viene en la gran corriente marina del Caribe, por su cercanía al litoral.

Desde Cabo Catoche, donde llegan las corrientes a un embudo y hace fiesta el Tiburón Ballena por tanto plancton, el arrecife baja y pasa por Isla Contoy plagada de pájaros marinos y plagada de tortugas, luego Isla Mujeres que está en la misma línea tan hermosa y tan turistica, nos recuerda el Garrafón de Castilla.

Así, sigue el arrecife y enfrente de Cancún nos regala sitios extraordinarios como los Cuevones, Manchones, el barco hundido, el Museo Subacuático y el Faro de Punta Cancún conocida como Punta Tiburón por sus escualos "Toro" que lamentablemente casi no vemos ya.

Así, el arrecife sigue bajando hasta Punta Nizuc, conservado, cercano y plagado de especies de colores.

Llega a Puerto Morelos que es incluso parque marino, rompiente y expuesto, bastión del snorkel y donde forma una laguna arrecifal con la playa y sus ojos de agua, en el pastizal marino.
La cosa se pone fea más al sur cuando hay una apertura para que barcos de gran calado entren al puerto de contenedores al sur de Puerto Morelos, un poco más abajo está la Marina del Cid y la violenta Punta Brava, donde la ola no permite muelles ni mucha presencia humana.
He arponeado ahí y esta cañón.

Seguimos con Playa de Carmen, siempre que buceo en Playa con Phantom Divers, con el Chino Loria y bajamos a convivir con los tiburones me pregunto: ¿Sabrá el turista que estamos enfrente a 500 metros buceando con tiburones enormes? Jajaja.
No lo imaginan.
Ahí el arrecife baja más de 20 m, está a 500m y se aproxima al Cantil, por el enorme surco que la gran corriente del Caribe erosiona entre Playa y Cozumel.
Enfrente en la isla del buceo, está el Cielo, al
Sur de Cozumel donde bucear es como volar y donde las imágenes nos hacen flotar en el aire con una visibilidad submarina de hasta 40 metros.
Una belleza extraordinaria.
Viene Punta Venado, el arrecife Sábalos y

donde en realidad pareciera que la playa y la
barrera coralina llegan a unirse, con un Cantil tan cerca, que por eso fue aprovechado para un Puerto de Gran Calado y donde arrastramos tragedias ambientales como Calica y su vecino innombrable.
El arrecife de Punta Venado ha sobrevivido por la gran fuerza de la corriente marina en esa zona, la corriente así como nos trae polución, igual en algunos puntos nos limpia por su ferocidad.
Luego está Akumal, ahí el Cantil se aproxima aún más a la costa, ahí salir a bucear o a pescar es tan rapido que mis amigos pescadores me cuentan que hace unos años el tour de pesca duraba dos horas.
En Tulum hay zonas de buceo tan ricas y con formaciones tan exuberantes como la ballena, donde la ola entra y sale disparada en la superficie como si una ballena estuviera respirando.
También en Tulum recuerdo mi fascinación por los surcos gigantescos submarinos, como diques, que la corriente ha venido raspando desde hace 15,000 años.
Son mil escenarios fantásticos de la barrera coralina, podemos seguirnos horas y horas.
Luego viene Sian Ka'an, sus Bahías, la zona de Punta Allen con delfines, langosta y mil colores.
Ni hablar de Majahual donde esta a metros de la playa, recuerdo en una de mis aventuras de buceo, que acampamos en la
playa en Majahual y al amanecer nos metíamos al agua con visor y snorkel y nadábamos quizá unos 30 metros y sacábamos varias langostas para desayunar con mantequilla, asadas a las brazas.
Uffff y recontar uffff...
Eso nos llevaba 30 minutos máximo por la abundancia y la cercanía.

Enfrente de Majahual está un paraiso submarino llamado Banco Chinchorro, cementerio de barcos hundidos, donde hay cañones y restos de galeones españoles de las épocas de los piratas y colonización de América, donde la vida es abundante.
Precisamente la corriente marina del Caribe entra entre el Sur de Cozumel y Banco Chinchorro.
Me sigo hasta Xcalak, solitario y silencioso, donde el arrecife está a un tiro de piedra, donde el canal Saragoza permite cruzar a la enorme Bahía de Chetumal y donde tuve un encuentro con una morena de varios metros bastante adrenalínico.
La Morena es un pez en forma de culebra, no el otro tipo de morena beliceña jajaja.
Luego el arrecife pasa por los Cayos de Belice, sigue siendo extraordinario y nos exhibe el Blue Hole, espléndido y misterioso. Y sigue hasta Honduras pasando por un brazo de Guatemala que llega al mar y hasta el Golfo de las Higueras Hondureño, que es un rincón del Caribe que tiene la mala fortuna de atrapar todo lo que le llega en las corrientes marinas, ahí está la isla de basura flotante más grande del Caribe.
Bueno, el Gran Arrecife Maya es nuestro y es único, es valios e importante, está en riesgo de extinción por el calentamiento global que lo afecta creando blanqueamiento letal y por una enfermedad llamada síndrome blanco que se atribuye a nuestra contaminación humana principalmente derivada del vertimiento de aguas residuales en nuestras ciudades costeras.
No estamos cuidando el arrecife, todos somos responsables de él y es vulnerable a nuestro desarrollo, cientos de cadenas alimenticias y servicios ambientales derivan de su buena salud.
Tenemos 300 kilómetros de biodiversidad submarina en nuestras manos, en total mide más de 1,000 kilómetros.
Gracias al arrecife tenemos caracol, tortugas, cocodrilos en los manglares, manatíes, tiburón ballena, águila pescadora, tiburón toro, dorado, pez vela, marlins, barracudas, morenas, atún, mero, boquineto, langosta y mil especies más, solo mencione las más exóticas y las que representan millones de dólares en ingresos turísticos.
Es indispensable reiterar que cuando te metas a conocerlo, no uses bloqueadores, no lo toques, no te agarres del coral si la ola te lleva, no pesques cerca del arrecife, no dejes basura, vigila que el motor de tu embarcación no tire aceite o gasolina, si vez basura, bolsas o plásticos cuando bucees recógelos y sácalos del agua.
Cuidémoslo, no será un gran espectáculo en el futuro hacer tours a verlo muerto.